Las tejas de almendra son un dulce tradicional típico de la gastronomía española, y especialmente populares en la ciudad de Toledo, como casi todas las delicias hechas con la almendra como base. Se preparan con ingredientes comunes, propios de cualquier cocina, y su elaboración es muy sencilla.

Suelen comerse después del postre, acompañadas de un café o una infusión; o a la hora de la merienda. Finas y crujientes, son un dulce perfecto para sorprender a las visitas. Lo mejor es que la receta de tejas de almendra es fácil de hacer, sobre todo si compramos la almendra ya lista para usar.

¿Ya te has decidido a probarlas? En muy poco tiempo podrás disfrutar de unas ricas tejas de almendra.

Receta de tejas de almendra

Ingredientes:
150 gramos de almendra cruda (o 100 gramos de almendra molida y 50 gramos de almendra en cubitos)
125 gramos de azúcar glacé
25 gramos de harina de trigo
Una pizca de sal
2 claras de huevo
25 gramos de mantequilla

Si usas almendras crudas enteras, debes moler una parte y trocear otra. Pero lo primero será pelarlas. Para ello, pon un cazo con agua al fuego. Cuando rompa a hervir, añade las almendras, apaga el fuego y deja escaldar durante un 1 minuto. Escurre, enfría bajo el grifo y pela haciendo presión con los dedos sobre la piel. A continuación, seca bien con papel absorbente y reserva hasta que pierdan la humedad. Luego, con un procesador potente, muele 100 gramos, con cuidado de que no se calienten o soltarán grasa y se apelmazarán. Debe quedar un polvo suelto, como harina. El resto, 50 gramos, pícalas en cubitos pequeños con un cuchillo bien afilado.



Mezcla en un recipiente la almendra molida, la almendra en cubitos, el azúcar, la harina y una pizca de sal con ayuda de una cuchara. Añade las claras y la mantequilla a temperatura ambiente. Mezcla de nuevo hasta obtener una masa homogénea. Tapa y deja enfriar en la nevera unas 3-4 horas.

Cubre una bandeja de horno con una lámina de silicona o con papel vegetal. Coge cucharadas de masa y reparte sobre la bandeja, dejando bastante espacio entre una y otra. Hornea a 170º grados durante 10 minutos, hasta que los bordes se empiecen a dorar. Saca la bandeja del horno y coloca inmediatamente las galletas sobre un objeto cilíndrico, para que cojan la forma.

→ La calidad de la almendra en este caso es fundamental porque es protagonista indiscutible. Si puedes, elige de la variedad marcona.

→ Ten paciencia con el reposo de la masa, es imprescindible para que queden perfectas.

→ Es muy importante extender bien la masa sobre la bandeja de horno, para que quede una capa muy fina. Solo así conseguiremos tejas crujientes.

→ Para dar forma a las tejas puedes usar un rodillo, un vaso de tubo, una botella tumbada, un tarro de vidrio... Busca objetos que tengan un diámetro de unos 5-7 cm.