Un mes más traigo una receta básica y fácil, perfecta para las chicas de El Club de Malasmadres. En este caso, empanadillas y con el paso a paso para preparar la masa casera. Lo mejor es que está lista en 5 minutos y es tan versátil que se puede rellenar de lo que quieras. Y antes de que me digas que pasas de fritangas porque estás con la 'operación bikini', te cuento que se hacen en el horno, así que no tienes excusa.
Las empanadillas son un plato clásico de nuestra cocina, aunque esta receta os va a sorprender por el exquisito relleno: arbolitos de brócoli, migas de queso feta y trocitos de piñones. Porque sí, hay empanadillas más allá del atún, del huevo duro y del tomate frito.
Lo mejor de esta masa de empanadillas casera es que se trabaja muy bien, no se pega y es flexible. La única consideración a tener en cuenta es que, una vez unidos los ingredientes, debes amasarla lo mínimo imprescindible, para que no se desarrolle el gluten y no estén correosas; y dejarla reposar, para que se relaje y no se encoja cuando intentes estirarla.
Si preparas esta receta, mándame una foto por email (tienes la dirección al comienzo de la columna derecha), súbela a mi página de Facebook o etiquétame en Twitter o Instagram como @rbkdtorres. Buen provecho ;)
Ingredientes:
-Para la masa (unas 20 unidades):
30 ml de leche
30 ml de vino blanco
30 ml de aceite de oliva
150 gramos de harina
Una pizca de sal
1 huevo
-Para el relleno:
200 gramos de brócoli
Elaboración:
Mezcla en un recipiente amplio los líquidos (leche, vino y aceite) y la sal. Incorpora la harina y remueve hasta que desaparezca. Pon la masa sobre la encimera bien limpia y amasa lo justo para que quede lisa y uniforme. Debe quedar una masa blanda, que se pegue un poquito. Si notas que se pega mucho, puedes añadir una cucharada más de harina, pero no te pases o quedará una masa reseca. Haz una bola y envuélvela en papel film transparente. Deja reposar durante al menos una hora a temperatura ambiente. Mientras la masa reposa, puedes ir preparando relleno. En este caso es tan fácil (no te llevará más de 10 minutos) que no hace falta.
Estira la masa sobre la encimera limpia hasta que quede muy fina (unos 2 mm). Puedes usar un rodillo o una botella de cristal lisa. Corta círculos de unos 10-12 cm y coloca en una bandeja con papel de horno.
Corta pequeños arbolitos de brócoli, lávalos, escurre y coloca en un recipiente apto para microondas. Pon un poquito de sal y aceite. Cocina a máxima potencia durante 3-5 minutos, moviendo cuando haya pasado la mitad del tiempo. Desmenuza el queso y pica los piñones. Rellena las empanadillas poniendo un par de arbolitos, unas migas de queso y unos trocitos de piñones. Dobla.
Sella muy bien el borde para que la empanadilla no se abra y se salga el relleno en el horno. Puedes usar un tenedor. Bate el huevo y pinta las empanadillas. Hornea unos 12-15 minutos a 180 grados (hasta que estén doraditas).
Sirve recién horneadas.
Trucos y consejos:
→ La harina debe ser floja, es decir, tener menos de un 10% de proteína en su composición, así será más difícil la formación de gluten. Para saber si la tuya es de este tipo, mira la composición en el paquete. La casilla 'proteínas' debe tener un valor inferior a 10 gramos.
→ Es imprescindible que la masa repose, una vez amasada, para que se relaje y no se encoja al estirarla. De hecho, cuando hayas recortado la primera tanda y recojas los recortes, tendrás que hacer de nuevo una bola y dejarla reposar unos 20 minutos. Luego estira de nuevo y corta más círculos.
→ Si lo prefieres, puedes freírlas en aceite de oliva bien caliente hasta que estén doradas.
→ Aunque lo ideal es comerlas recién hechas, las cocinadas al horno se pueden ‘recalentar’ en el mismo horno hasta que recuperen la temperatura (no las calientes en el microondas o se pondrán blandengues).
→ La masa aguanta 2-3 días en la nevera y se puede congelar. Te recomiendo que la dejes ya cortada en círculos, separados con un trozo de papel de horno (como las compradas) y envueltas en film transparente. Así evitarás tanto que la masa se humedezca, como que se reseque.
Gracias por leerme,
-Para la masa (unas 20 unidades):
30 ml de leche
30 ml de vino blanco
30 ml de aceite de oliva
150 gramos de harina
Una pizca de sal
1 huevo
-Para el relleno:
200 gramos de brócoli
60 gramos de queso feta
Un puñado de piñones
Aceite de oliva
Sal
Elaboración:
Mezcla en un recipiente amplio los líquidos (leche, vino y aceite) y la sal. Incorpora la harina y remueve hasta que desaparezca. Pon la masa sobre la encimera bien limpia y amasa lo justo para que quede lisa y uniforme. Debe quedar una masa blanda, que se pegue un poquito. Si notas que se pega mucho, puedes añadir una cucharada más de harina, pero no te pases o quedará una masa reseca. Haz una bola y envuélvela en papel film transparente. Deja reposar durante al menos una hora a temperatura ambiente. Mientras la masa reposa, puedes ir preparando relleno. En este caso es tan fácil (no te llevará más de 10 minutos) que no hace falta.
Estira la masa sobre la encimera limpia hasta que quede muy fina (unos 2 mm). Puedes usar un rodillo o una botella de cristal lisa. Corta círculos de unos 10-12 cm y coloca en una bandeja con papel de horno.
Corta pequeños arbolitos de brócoli, lávalos, escurre y coloca en un recipiente apto para microondas. Pon un poquito de sal y aceite. Cocina a máxima potencia durante 3-5 minutos, moviendo cuando haya pasado la mitad del tiempo. Desmenuza el queso y pica los piñones. Rellena las empanadillas poniendo un par de arbolitos, unas migas de queso y unos trocitos de piñones. Dobla.
Sella muy bien el borde para que la empanadilla no se abra y se salga el relleno en el horno. Puedes usar un tenedor. Bate el huevo y pinta las empanadillas. Hornea unos 12-15 minutos a 180 grados (hasta que estén doraditas).
Sirve recién horneadas.
Trucos y consejos:
→ La harina debe ser floja, es decir, tener menos de un 10% de proteína en su composición, así será más difícil la formación de gluten. Para saber si la tuya es de este tipo, mira la composición en el paquete. La casilla 'proteínas' debe tener un valor inferior a 10 gramos.
→ Es imprescindible que la masa repose, una vez amasada, para que se relaje y no se encoja al estirarla. De hecho, cuando hayas recortado la primera tanda y recojas los recortes, tendrás que hacer de nuevo una bola y dejarla reposar unos 20 minutos. Luego estira de nuevo y corta más círculos.
→ Si lo prefieres, puedes freírlas en aceite de oliva bien caliente hasta que estén doradas.
→ Aunque lo ideal es comerlas recién hechas, las cocinadas al horno se pueden ‘recalentar’ en el mismo horno hasta que recuperen la temperatura (no las calientes en el microondas o se pondrán blandengues).
→ La masa aguanta 2-3 días en la nevera y se puede congelar. Te recomiendo que la dejes ya cortada en círculos, separados con un trozo de papel de horno (como las compradas) y envueltas en film transparente. Así evitarás tanto que la masa se humedezca, como que se reseque.
Gracias por leerme,
4 comentarios
Una delicia de receta.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias Meritxell
EliminarPedazo empanadillas, junto a las fresas y al batido tengo el menú completo :D
ResponderEliminarbesos
Esta muy buena este receta la practicare saludos
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